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Un sabor amargo en la boca puede ser síntoma de caries.

Un sabor amargo en la boca puede ser síntoma de caries.

Un sabor amargo en la boca puede ser síntoma de caries.

Las caries suelen ser un problema, ya que muchas veces nos percatamos muy tarde de que las tenemos, esto es debido a que el dolor suele ser la principal causa de que se acuda al dentista, pero otros síntomas pueden ser nuestros mayores aliados para poder advertir de que la salud podría estar comprometida, uno de estos es el tener un sabor amargo en la boca cuando no se ha comido ningún alimento que provoque esta característica.

Recuerda que la aparición de este sabor desagradable, de forma puntual o permanente, puede estar avisando de patologías digestivas, hepáticas y bucodentales, entre otras, por lo que es muy importante consultar con un experto si se empieza a presentar este síntoma para que pueda descartar enfermedades bucodentales y/o recomendar acudir al profesional indicado, ya que es de suma importancia acudir a consulta antes de que el problema pueda ir a más.

En el caso de la salud bucodental, como ya hemos comentado, el sabor amargo en la boca puede estar indicando la presencia de una caries o de inflamación en las encías. En lugares como la cavidad bucal viven numerosas bacterias y una limpieza diaria deficiente puede derivar en su excesiva acumulación en dientes y encías. Además, si ya se padece una enfermedad periodontal, como gingivitis y periodontitis, las encías pueden sangrar, lo que genera sabor amargo y mal aliento (también conocido como halitosis).

Por ello, es de suma importancia recurrir al dentista, ya que este indicará, según el estado de la salud oral de a cada paciente qué medidas de higiene diaria bucodental son necesarias y si se requiere, además del habitual cepillado de dientes y lengua (con especial incidencia antes de ir a dormir), el uso de otros productos como el cepillo interproximal, enjuagues o seda dental.

Existen algunas enfermedades como la diabetes o la insuficiencia renal que pueden también provocar que el paciente sea más propenso a sufrir este sabor amargo en la boca, el cual puede ser permanente o presentarse en varios momentos del día.

Tratamientos contra el cáncer o el uso de determinados medicamentos, como antibióticos, antidepresivos y vitaminas prenatales, son propensos también a provocar esta condición como efecto secundario. Otro caso también son los casos de las mujeres en las cuales las alteraciones hormonales, derivadas del aumento de estrógenos durante la menstruación o el embarazo, suponen un mayor riesgo a la hora de padecer este desagradable sabor en la boca.

Por otra parte, una situación de excesivo estrés también es posible que derive en este sabor amargo, al producir la disminución de la cantidad de saliva, y, por tanto, aumentar la sequedad de la boca.

Como verás existen múltiples factores los cuales pueden derivar en un mismo síntoma, así que entenderás por qué la importancia de la visita al dentista de manera regular, de esta manera podrás estar tranquilo/a de que tu boca está en mano de profesionales.

Así que ya sabes, si aún no tienes un dentista de cabecera y no te has hecho tu revisión semestral, ven a Clínica dental Laura Casillas, que juntos haremos de tu sonrisa la envidia del mundo.